Aquí las hojas, en pleno proceso de marchitarse y mudar de color.
Inverosímil es, por cierto, el rojo rubí con que se marchita la hoja. Muere con poesía.
Atrás, por entre las hojas caducas, corre el río San Antonio, silencioso, lamiendo playas de arena dorada.
Acercamiento de la hoja. Nótese la nervadura central, y el borde apenas aserrado.