En el Alvarillo del Campo, similar a lo que sucede con el Guindillo en Otoño y en Invierno, que se vuelven rojas mientras se marchitan, las hojas nuevas brotan tintas de tonos rojos, amarillos y naranjas.
Luego, a medida que la hoja madura, gradualmente se tiñe de verde.
Como muchos otros árboles nativos, las ramas principales y las ramitas menores terminan con una aguda espina por punta.